Una vez me leyeron uno de esos relatos orientales que tanto me gustan,y que decía lo siguiente:
Un monje le pregunto a su maestro: "sea lo que sea lo que nos depare el futuro, ¿cual es el camino?". El maestro le respondió: "el camino, es tu día a día."
Con el tiempo y la experiencia logré entender la profundidad del mensaje, mucho más allá de lo evidente del lenguaje.
Así es como fuí creciendo, aprendiendo y humildemente enriqueciendo mi vida. Entendí hace mucho tiempo que el objetivo no es conseguir algo en concreto, es fluir con la rueda de la vida,que nunca se para, y muchas veces nos da vértigo,...es meterse de lleno en el vacío, donde nada está bajo tú control, donde lo abstracto,lo inunda todo,y donde a veces no nos atrevemos a entrar...
Es cultivar la conciencia, saber escuchar, aprender y enriquecerse de nuestro entorno,con aquello tan precioso que nos regala la existencia,tan simple....tan simple....tan simple y de lo que estamos desconectados muchas veces....como estar presente.
Aprendí a estar atento a los mensajes, enseñanzas, de los grandes maestros, que siempre son los que te hacen pensar,moverte por ti mismo,no los que te quieren guiar hacia algo...en concreto.
Estar atentos y despiertos,a ellos,aunque sean de procedencias diferentes,de culturas diferentes,o de ideologías diferentes,da igual,esa es la gran riqueza de nuestras vidas,...escuchar y aprender el despertar a través de la práctica.
Los grandes maestros nos enseñan y nos ofrecen contenidos llenos de sabiduría y conocimiento, para que busquemos nuestro propio camino.
El mejor maestro que jamás he conocido es..la vida,simple y llanamente,..ese "día a día" que se relataba en aquel cuento...y que te va poniendo delante de ti,las herramientas y personas necesarias para ayudarte a cultivar tu camino....y que te hagan ver que siempre eres tú y solo tú quién decide su senda.
Aprendes a fluir,no a buscar...nada en concreto...y llega un día en que entiendes las palabras de un Sensei,un verdadero maestro de la vida que uno tuvo la gran suerte de conocer, y que me decía..."aquí y ahora eres un niño,tengo que ayudar a educarte y aquí he de ponerte algún límite,ayudarte a que veas el nivel de calidad del tiempo que tienes en esta vida,te exigiré si,pero también te valoraré,y te estimularé...y si me has elegido y yo a ti,quiero que no creas en mi,en lo que yo te diga,o porque yo te lo diga,quiero que lo vivas,que lo experimentes,que sientas todas las maravillas de la vida,que yo te explico cada día,y que vayas cuestionándote las cosas, todas las cosas que vayamos hablando y viendo.
Decía siempre...recuerda siempre que ahora eres un niño,en este momento eres un niño..y no le entendía..esta frase....
Con el tiempo , y la experiencia supe lo que me quería decir esa simple...simple...frase...que tanto me repetía...y no me equivoqué cuando Sensei me dijo años después...
Tienes que ayudar a quién puedas, a despertar su potencial y a que sepa que es un "maestro" en un futuro,en cualquier orden de la vida,pero solo que esa persona probablemente no lo sepa aún,o simplemente todavía no sea su momento.
La verdad, tu verdad está en el interior,y el único camino para crecer ,es comprender quién eres,qué puedes ofrecer a la humanidad, y cuál es tú función aquí...y eso solo se consigue siguiendo tu propio sendero.....
Como decía Alexander Ruperti..."Aunque uno no es libre de cambiar el propio potencial de la existencia, cada individuo es libre para decidir lo que hará con ese potencial".
Todos y cada uno de nosotros somos los maestros de nuestras vidas,pero solo lograremos entenderlo caminando en nuestro "día a día".Namasté.
Un monje le pregunto a su maestro: "sea lo que sea lo que nos depare el futuro, ¿cual es el camino?". El maestro le respondió: "el camino, es tu día a día."
Con el tiempo y la experiencia logré entender la profundidad del mensaje, mucho más allá de lo evidente del lenguaje.
Así es como fuí creciendo, aprendiendo y humildemente enriqueciendo mi vida. Entendí hace mucho tiempo que el objetivo no es conseguir algo en concreto, es fluir con la rueda de la vida,que nunca se para, y muchas veces nos da vértigo,...es meterse de lleno en el vacío, donde nada está bajo tú control, donde lo abstracto,lo inunda todo,y donde a veces no nos atrevemos a entrar...
Es cultivar la conciencia, saber escuchar, aprender y enriquecerse de nuestro entorno,con aquello tan precioso que nos regala la existencia,tan simple....tan simple....tan simple y de lo que estamos desconectados muchas veces....como estar presente.
Aprendí a estar atento a los mensajes, enseñanzas, de los grandes maestros, que siempre son los que te hacen pensar,moverte por ti mismo,no los que te quieren guiar hacia algo...en concreto.
Estar atentos y despiertos,a ellos,aunque sean de procedencias diferentes,de culturas diferentes,o de ideologías diferentes,da igual,esa es la gran riqueza de nuestras vidas,...escuchar y aprender el despertar a través de la práctica.
Los grandes maestros nos enseñan y nos ofrecen contenidos llenos de sabiduría y conocimiento, para que busquemos nuestro propio camino.
El mejor maestro que jamás he conocido es..la vida,simple y llanamente,..ese "día a día" que se relataba en aquel cuento...y que te va poniendo delante de ti,las herramientas y personas necesarias para ayudarte a cultivar tu camino....y que te hagan ver que siempre eres tú y solo tú quién decide su senda.
Aprendes a fluir,no a buscar...nada en concreto...y llega un día en que entiendes las palabras de un Sensei,un verdadero maestro de la vida que uno tuvo la gran suerte de conocer, y que me decía..."aquí y ahora eres un niño,tengo que ayudar a educarte y aquí he de ponerte algún límite,ayudarte a que veas el nivel de calidad del tiempo que tienes en esta vida,te exigiré si,pero también te valoraré,y te estimularé...y si me has elegido y yo a ti,quiero que no creas en mi,en lo que yo te diga,o porque yo te lo diga,quiero que lo vivas,que lo experimentes,que sientas todas las maravillas de la vida,que yo te explico cada día,y que vayas cuestionándote las cosas, todas las cosas que vayamos hablando y viendo.
Decía siempre...recuerda siempre que ahora eres un niño,en este momento eres un niño..y no le entendía..esta frase....
Con el tiempo , y la experiencia supe lo que me quería decir esa simple...simple...frase...que tanto me repetía...y no me equivoqué cuando Sensei me dijo años después...
Tienes que ayudar a quién puedas, a despertar su potencial y a que sepa que es un "maestro" en un futuro,en cualquier orden de la vida,pero solo que esa persona probablemente no lo sepa aún,o simplemente todavía no sea su momento.
La verdad, tu verdad está en el interior,y el único camino para crecer ,es comprender quién eres,qué puedes ofrecer a la humanidad, y cuál es tú función aquí...y eso solo se consigue siguiendo tu propio sendero.....
Como decía Alexander Ruperti..."Aunque uno no es libre de cambiar el propio potencial de la existencia, cada individuo es libre para decidir lo que hará con ese potencial".
Todos y cada uno de nosotros somos los maestros de nuestras vidas,pero solo lograremos entenderlo caminando en nuestro "día a día".Namasté.